viernes, 14 de octubre de 2005

Para culebrón la vida

Hasta que mi abuelo enfermó creo que nunca había hablado seriamente con mi abuela.Pero desde que tuve que ayudarla a cuidar de mi abuelo poco a poco empezamos a contarnos cosas y fue ahí donde descubrí la mujer que ha sido y es mi abuela.
Ahora que ha enviudado la pobre se aburre mucho y está enganchada a los culebrones.Ha pasado de los Gavilanes a una que transcurre durante la guerra civil y en la que según dice se ve todo lo que ellos pasaron en la guerra.
Hoy tirando del hilo ha terminado contandome la historia de su hermana y de su cuñado que no tiene nada que envidiarle a ninguna telenovela.
El cuñado de mi abuela conoció a mi bisabuelo cuando ambos estaban presos en la cárcel.
El padre de mi abuela por llevar la cantina de un cuartel y el otro acusado de matar a un cura y a una monja.
Diez meses y cinco años pasaron respectivamente encerrados cuando ninguno era culpable.
A mi bisabuelo lo hecharon a la calle sin nisiquiera hacerle un juicio y entonces se dedicó a mover papeles para demostrar la inocencia de su amigo.
Cuando finalmente lo consiguió este se quedo viviendo aquí en Cartagena y cortejando a mi tía-abuela que por entonces tenía dieciocho años.
Si hasta aquí ya hay para unos cuarenta capítulos aún faltaba el giro dramático que pondría en jaque la recién conseguida felicidad de la pareja.
Mi bisabuelo pidió una fe de bautismo de su amigo supongo que para arreglar los papeles de la boda.
Resultó que este tenía mujer y un hijo en Barcelona y cuando mi familia se enteró lo echó de casa.
El hombre se marchó de vuelta a la ciudad condal y siguió mandando avisos de conferencia (mi familia no tenía teléfono) que recogía mi abuela ya que a su hermana le estaba prohibido.
Esta por su parte le mandaba a él cartas a escondidas de su madre con las chicas que tenía empleadas en el taller de sastrería de ambos.
En una de ellas, que mi bisabuela interceptó, le prometía huir cuando cumpliera los veintiun años (mayoría de edad de entonces) y su madre decidió que prefería que él viniera aquí y vivieran juntos antes que perder a su hija y no saber que vida llevaban.
De este modo el "enamorado" volvió y ambos se fueron juntos.
Mientras todo esto pasaba la primera mujer había mandado a su hijo con los niños que se llevaron a Rusia y se había dedicado a prostituirse.
Cuando años después llegó la noticia de que ella había muerto y por lo tanto nuestro protagonista enviudado mi tía abuela y él ya compartían dos hijas.
Se casaron después de ser padres y de haber pasado por mil sufrimientos.
Del primer hijo de mi tío-abuelo nunca se supo nada porque aunque después de la guerra él le mandó muchas cartas he intentó recuperar el contacto nunca pudo localizarlo.

Pues ya veís cada día voy descubriendo una nueva historia de mi familia y no dejo de sorprenderme.
La vida de mi abuela esta llena de giros que nunca me hubiera imaginado hace unos años.
Ahora me arrepiento de no haber hablado antes con ella.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Vaya, me alegro de que hayas hablado y descubierto la emocionante vida de tu abuela. Por eso yo siempre me alegrare de haber hablado tanto y tanto con mi abuela antes de morir.

Te quiero abuela.

Te quiero papá.

Carol.