domingo, 25 de enero de 2009

De blanco


Aunque parece ser que Facebook ha matado los blogs y que hasta se puede oir el silencio que hay en la blogosfera a mi esta nueva moda no me atrae lo más mínimo. No sé que es pero no me llama...
Así que yo sigo, poco, pero sigo tejiendo por aquí mis cosillas.
Mi última ilusión es mi vestido de novia. Los dos días que libré a media semana metí a mi cuadrilla de organizadoras de boda en el coche de mi hermana y nos fuimos a ver vestidos de manera intensiva.
Cuarenta y ocho horas de desnudarme delante de espejos de 360º probandome algunas de las pesadillas de tul, pedrería y volantes más exageradas que se pueda uno imaginar.
En la octava tienda encontré justamente lo que quería . Una vez que me vi con el ya no quise ver ninguno más. Sabía que quería justo ese vestido.
Ahora tengo que esperar hasta septiembre para las primeras pruebas ya que al ser un taller me los hacen a media y no voy a tenerlo colgado diez meses del armario.^^

2 comentarios:

Findûriel dijo...

Ese creo que es el mejor método: probarte y probarte rodeada de gallinicas como tú, hasta que de repente sueltas el tremendo OH MY GOD y te plantas.

Buaaaaaaa, eso no se hace... yo quiero verloooo u.u

Besos y besucos a Peter

Anónimo dijo...

Siiiiiiiiiiiii!! Vas a estar wapííííísimaaa!! :D:D